Hasta hace poco la ordenación territorial no había considerado la necesidad de hacer viable la convivencia de los procesos que mantienen la biodiversidad con los usos y aprovechamientos del ser humano. Este manual presenta los principios básicos de la ecología del paisaje como instrumentos para el diagnóstico de los sistemas desde ese punto de vista. La idea es poder ordenar el territorio teniendo en cuenta no sólo las funciones territoriales básicas de la sociedad humana, sino también incardinando en el espacio las redes de relación ecológica que mantienen la biodiversidad en los territorios mixtos donde los valores ecológicos conviven con los culturales. El manual además incluye la revisión de cuatro casos recientes de planificación.