El libro -que presenta una documentación fotográfica excepcional, además de mapas y gráficos- se desarrolla en dos partes claramente diferenciadas. En la primera se realiza una aproximación a la flora del entorno de las Tablas de Daimiel, área en que se encuentran representadas tres comarcas naturales de nuestra provincia, por lo que el estudio se puede hacer extensivo a gran parte del territorio provincial e incluso regional. En la segunda, el protagonista es el hombre: agricultores, artesanos, pastores y carreteros, curanderos y molineros..., un universo en el que vamos conociendo sus trabajos y aplicaciones a partir de las plantas, y que acaba siendo un verdadero homenaje a los depositarios de nuestra cultura tradicional, a quienes encontraban en la vegetación su alimento, su medio de vida o sus medicinas.