El ajedrez debe a Alekhine no sólo el tesoro de sus formidables producciones como jugador , sino , además , el haber recogido y analizado sus partidas en una obra inmortal.Este libro recoge la primera parte de esa obra y comprende cien partidas seleccionadas entre aquellas que el genio consideró mejores de toda su primera época , de 1908 a 1923. El aficionado tiene la fortuna de conocer , conducido de la mano del propio Alekhine , la maravillosa técnica del gran campeón en un libro que es , a la vez , un tratado de enseñanza del juego y un legado para la historia del ajedrez.