¿Cuántas historias encierra un simple guijarro? Historias de su pasado lejano, historias de esta tierra nuestra en unos tiempos en que se parecía poco a la que conocemos ahora. Jan Zalasiewicz, como en el famoso verso de William Blake —Ver el mundo en un grano de arena—, decide adentrarse en el guijarro, preguntarle por su pasado, y de ello resulta una biografía de un guijarro, y a la vez del planeta en el que se produjo esa piedra, la Tierra que habitamos. Zalasiewicz es un excelente divulgador. La narración, concisa, asequible para cualquier lector, tiene la rara virtud de exponer con suma claridad, y pequeñas dosis de ironía, los procesos de formación del planeta —creación de continentes, mares, montañas, volcanes… y guijarros—, y la subsiguiente destrucción de todo ello, de la que surgirán de nuevo miríadas de partículas que volverán a utilizarse para construir otros paisajes, nuevos mares, nuevos continentes y montañas, volcanes y otra vez guijarros, en ciclos cuyo único límite será la duración de las vidas del Sol y la Tierra. Un viaje extraordinario que parte de un pequeño guijarro —¿cuántas cosas pueden averiguarse a partir de una piedra tan pequeña? es posible que la respuesta nos deje asombrados—, y nos lleva por la historia geológica del planeta, por su vertiginoso pasado y los atisbos de su destino futuro, más o menos probable, que nos permite conocer los ingeniosos métodos que hacen posibles estos viajes del conocimiento y cuánto es lo que todavía desconocemos. Las mil y una historias que encierra un simple guijarro, contadas como sabe hacer Zalasiewicz, conforman un relato tan original como memorable.