El juego es divertido, pero no caigas en la trampa de pensar que se trata de un mero pasatiempo o de una actividad frívola. El juego es poderoso y tiene una influencia profunda sobre la relación que creas con tu perro. En este interesante libro se muestra cómo el juego puede mejorar la relación entre nosotros y nuestros perros, afinando sus respuestas a nuestras solicitudes, al tiempo que les proporcionamos el ejercicio físico y mental que necesitan. Dentro encontrarás información científica actual sobre cómo decirle a tu perro que quieres jugar (la mayoría de nosotros no somos muy buenos en esto), algunas habilidades y encantadores juegos con los que dejar boquiabiertos a los amigos, así como una sección crucial sobre juegos a evitar con tu perro. Si lo que quieres es mejorar el vínculo con tu perro, que responda mejor cuando le pides algo y una relación más cercana entre los dos, entonces este libro es para vosotros.