Lucentino de nacimiento y rondeño de adopción, Curro Lucena comienza su andadura flamenca a muy temprana edad. Con apenas veinte años marcha a Madrid; allí, de la mano de Pepe el de la Matrona, en el tablao Zambra, y junto a otros grandes cantaores del momento, como Juanito Varea, Rafael Romero ·el Gallina" o Pericón de Cádiz, se consolida como cantaor flamenco...
Estas páginas encierran a un maestro en su madurez, a un cantaor que jamás ha pisado el terreno comercial del cante, a un artista estudioso, de una honradez intachable, heredero de la más pura ortodoxia.