En esta publicación se demuestra que los platos típicos riojanos siempre tienen el complemento perfecto e, incluso, la base en uno y otro de los vinos riojanos. Porque al igual que el vino, en la gastronomía riojana están presentes la verdura y la fruta, los caparrones de Anguiano, la ternera de las Trece Villas, los fardelejos de Arnedo, los mazapanes de Soto, las setas y los champiñones, las chuletillas de cordero, las conservas, el aceite, los encurtidos...